Rob y Monica con el vestido de verano
La novia de Grace, Monica y Rob, se casaron en Chipre en el Hotel Amara. Después de planificar una gran ceremonia y celebración antes de que llegara la COVID, era casi imposible reunir a todos en un mismo lugar. Sin embargo, en un giro de los acontecimientos, la familia, que ahora está formada por tres, decidió escaparse y celebrar juntos. Los momentos de la ceremonia, sencillos e íntimos, los compartieron los recién casados con su hijo de seis meses, Oscar, amante de las fiestas.
¿Qué es para ti una mujer Grace?
Elegante, fuerte, aventurera y con estilo.
¿Qué vestido de GRACE usaste y cómo supiste que era 'el indicado'?
Estaba entre Clo, Summer y Valentina, ¡todas tan hermosas! Cuando me puse Summer, fue 100% la indicada: la espalda escotada, la elegancia y la simplicidad eran exactamente lo que estaba buscando.
Cuéntanos tu experiencia al encontrar tu vestido.
¿Compraste tu vestido de novia online o visitaste uno de nuestros Showrooms?
Elegí algunos que me gustaron en línea, luego fui al Showroom de Londres , bebí un poco de champán y me los probé todos. ¡El día perfecto! El personal fue increíblemente profesional y servicial. Compré el vestido allí mismo.
¿Cuál fue tu primera cita?
Nuestra primera cita fue un almuerzo informal solo para los dos, pero yo era increíblemente tímida y terminó siendo bastante incómoda. Me sorprendió que hubiera más citas después de eso.
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¿Donde te casaste?
Cuéntanos sobre la ubicación y el estilo de tu boda.
Nos fugamos a Chipre, al Hotel Amara, y decidimos celebrar una ceremonia muy sencilla e íntima, solo nosotros dos y nuestro hijo de seis meses, Oscar, amante de las fiestas. Habíamos planeado una gran ceremonia y celebración antes del Covid, pero era casi imposible reunir a todos nuestros seres queridos en un solo lugar. Terminamos escapándonos solo los tres. Quería que el estilo fuera clásico, elegante y sobrio. Queríamos que fuera diferente, pero que tuviera toques tradicionales.
¿El momento más divertido del día o algo que te sorprendió?
Algunos de los pasos de baile de mi marido fueron toda una sorpresa y lo bien que nos lo pasamos los tres solos. También fue emotivo y muy especial, más de lo que esperaba.
¿Algún último consejo o palabras de sabiduría que puedas compartir?
El cliché clásico de disfrutar cada momento es cierto. Pasa muy rápido, así que disfrútalo al máximo.
